Crítica en 200 palabras (o casi): Cuestión de sangre (1994)
Lugar de proyección: Sala 1 del Cine Doré (Filmoteca Española).
Formato de proyección: 35mm.
Valoración: ★★★ (Quizá la vuelva a ver).
Ahí va la crítica:
Cuestión de sangre (Little Odessa) (James Gray, 1994): La primera película de James Gray es una muestra bastante madura de lo que será su cine a pesar de contar con solo 24 años de edad: una realización clásica, sin estridencias, con un ritmo pausado inusual en el cine de gánsteres de la época, y una creación de atmósferas muy eficaz. En el gélido Brighton Beach de Brooklyn, conocido como la pequeña Odessa por la procedencia ucraniana de muchos de sus vecinos, se desarrolla un drama familiar marcado por la actividad criminal de uno de los hijos. En su regreso al barrio para cometer un asesinato por encargo se reencuentra con una madre enferma terminal, un padre adúltero y violento, y un hermano pequeño que intenta sobrevivir en ese ambiente malsano. Gray es un buen imitador del cine que le gusta, pero en esta primera obra también demuestra su propia personalidad aunque en apariencia no ofrezca nada nuevo. Es de esas películas que no destacan porque sus méritos quedan ocultos bajo su extrema sobriedad, lo que es un mérito en un director tan joven, pero quizás se le fue la mano por el lado contrario y hubiera necesitado algo más de garra en algunas escenas fundamentales.
Criterio de valoración:
● (No debería haberla visto)
★ (Espero no volver a verla)
★★ (Podría volver a verla)
★★★ (Quizá la vuelva a ver)
★★★★ (Seguro que volveré a verla)
★★★★★ (La veré varias veces)
Cinema Nostrum 