Crítica en 200 palabras (o casi): Valentina (2021)
Lugar de proyección: mi hogar, dulce hogar.
Formato de proyección: VOD (Veoforqué).
Valoración: ★★ (Podría volver a verla).
Ahí va la crítica:
Valentina (Chelo Loureiro, 2021): Visto que la película de animación Gora Automatikoa no ha ganado el Goya para la que fue concebida, a pesar de sus méritos, no podíamos dejar de comprobar los de la finalmente ganadora. Una vez más se demuestra que las intenciones pesan más que los resultados cuando los académicos dan su voto, de modo que una gamberrada, por muy divertida y dinámica que sea, nada tiene que hacer ante una tierna aventura protagonizada por una niña con síndrome de Down. Es justo el tipo de película de la que se mofaban los creadores de Gora Automatikoa, aquella que busca humedecer los ojos de los espectadores a base de sentimentalismos que embellecen la realidad, ocultándola. Aquí incluso la muerte parece deseable. Y nada objetaremos a las aspiraciones a trapecista de la niña, pues nadie tiene derecho a matar sus ilusiones, pero la película no demuestra en ningún momento que eso sea posible. Su discurso se difumina en una confusa sucesión de escenas incapaces de articular nada coherente sobre su condición más allá de proclamar que es especial, como si todo dependiera de su fuerza de voluntad. Sin embargo, visual y musicalmente es a ratos una película bastante atractiva de ver.
Criterio de valoración: ★ (Espero no volver a verla) ★★ (Podría volver a verla) ★★★ (Quizá la vuelva a ver) ★★★★ (Seguro que volveré a verla) ★★★★★ (La veré varias veces).