Crítica en 200 palabras (o casi): Le mur (1967)
Lugar de proyección: mi hogar, dulce hogar.
Formato de proyección: DVD (origen VHS).
Valoración: ★★★ (Quizá la vuelva a ver).
Ahí va la crítica:
Le mur (Serge Roullet, 1967): Cualquier reflexión que se haga sobre la muerte suele desembocar en otras sobre la vida y la imposibilidad de comprenderla. En esta película, basada en una novela del filósofo Jean-Paul Sastre, se intenta plasmar cinematográficamente esa inquietud que nos produce la muerte haciéndonos compartir las últimas horas de tres condenados al paredón. El hecho de que esté ambientada durante la Guerra Civil Española, y que los presos sean dos anarquistas y un inocente con mala suerte, no es importante para su discurso, pues sus inquietudes no pueden ser más universales. Sin embargo, ese hecho le confiere una extraña singularidad porque estamos ante un cine militante antifascista algo desencantado puesto en escena a la manera de Bresson, al menos en las escenas del interior de la celda. En ocasiones los diálogos son demasiado filosóficos como para desarrollarse en una situación tan extrema por mucho que sean intelectuales, pero es una leve pega frente a la intensidad que logra su director en su camino hacia un final sorprendente que enfatiza lo absurda que es la vida. Por otro lado, se agradece que se respete la diversidad lingüística franco-hispana necesaria para la coherencia de la narración, si bien algunos acentos suenan extraños.
Criterio de valoración:
● (No debería haberla visto)
★ (Espero no volver a verla)
★★ (Podría volver a verla)
★★★ (Quizá la vuelva a ver)
★★★★ (Seguro que volveré a verla)
★★★★★ (La veré varias veces)