Crítica en 200 palabras (o casi): Nieva en Benidorm (2020)
Lugar de proyección: mi hogar, dulce hogar.
Formato de proyección: VOD (Veoforqué).
Valoración: ★ (Espero no volver a verla).
Ahí va la crítica:
Nieva en Benidorm (Isabel Coixet, 2020): La cineasta española más multicultural nos lleva esta vez al Benidorm vivido por los ingleses que vacacionan allí. Un maduro empleado de banca de aquel país, cuya única afición es el clima, es despedido y decide visitar a su hermano, al que hace muchos años que no ve porque vive en la capital turística de la costa española. Allí aterriza como un extraterrestre en territorio ignoto, proporcionando al espectador que tampoco conozca aquel lugar un panorama lleno de contrastes pero que desentona bastante con el estado de ánimo de su protagonista. Es un buen personaje, un inocente de vida gris que lleva la soledad cincelada en el rostro de un gran Timothy Spall, pero la peripecia a la que se enfrenta –la desaparición de su hermano debido a una oscura trama inmobiliaria– pronto deja de interesarnos. La relación con una madura bailarina erótica, igualmente sola en el mundo, tampoco consigue despertar demasiado nuestra atención. Esto es consecuencia de una total falta de ritmo en una narración interrumpida por superfluas digresiones y por una puesta en escena que a fuerza de querer ser fluida acaba por ser desconcertante, con extraños movimientos de cámara que nos sacan completamente de situación.
Criterio de valoración: ★ (Espero no volver a verla) ★★ (Podría volver a verla) ★★★ (Quizá la vuelva a ver) ★★★★ (Seguro que volveré a verla) ★★★★★ (La veré varias veces).