Crítica en cien palabras (o casi): Mudar la piel (2018)
Lugar de proyección: Sala Azcona de la Cineteca.
Formato de proyección: DCP.
Valoración: ★★★★ (Seguro que volveré a verla).
Ahí va la crítica:
Mudar la piel (Ana Schulz y Cristóbal Fernández, 2018): La hija de Juan Gutiérrez, mediador entre el Gobierno y Eta en los años 90, indaga sobre la relación de su padre con un colaborador y amigo que, tras su desaparición, resultó ser un espía del Cesid luego condenado por alta traición. Es un argumento de alto voltaje político, pero también de gran emotividad porque indaga en sentimientos siempre difíciles de expresar. Como ya es habitual en el género, las dificultades de la propia investigación son parte esencial de la película, pero sorprendiéndonos con una nueva vuelta de tuerca aunque no evite algunos tics propios de los documentales de autor.
Criterio de valoración: ★ (Espero no volver a verla) ★★ (Podría volver a verla) ★★★ (Quizá la vuelva a ver) ★★★★ (Seguro que volveré a verla) ★★★★★ (La veré varias veces).