Crítica en cien palabras (o casi): Los miércoles no existen (2015)
Lugar de proyección: Sala 8 del Cine Acteón.
Formato de proyección: DCP.
Valoración: ★★★★ (Seguro que volveré a verla).
Ahí va la crítica:
Los miércoles no existen (Peris Romano, 2015): La comedia urbana con toques dramáticos en torno a las relaciones de pareja entre treinteañeros desorientados es ya un subgénero del cine español. Que venga aderezada con canciones no es una frivolidad, sino que la tiñe de un tono melancólico muy coherente con su contenido. Los relatos entrecruzados de sus personajes no son especialmente originales, ni todas están al mismo nivel, pero no importa demasiado. Su autenticidad interpretativa –especial mención a William Miller– y su dinamismo narrativo –avanza y retrocede varias veces en el tiempo– son capaces de sostener la función y nuestra sonrisa durante más de dos horas.
Criterio de valoración: ★ (Espero no volver a verla) ★★ (Podría volver a verla) ★★★ (Quizá la vuelva a ver) ★★★★ (Seguro que volveré a verla) ★★★★★ (La veré varias veces).