Crítica en cien palabras (o casi): La mujer de la arena (1964)
Lugar de proyección: Sala 1 del Cine Doré (Filmoteca Española).
Formato de proyección: 35 mm.
Valoración: ★★★★ (Seguro que volveré a verla).
Ahí va la crítica:
La mujer de la arena (Suna no onna) (Hiroshi Teshigahara, 1964): Un entomólogo busca en la arena insectos para su colección mientras reflexiona sobre las burocráticas ataduras de la vida en pareja. Poco después, él mismo queda atrapado en la casa de una bella mujer que sobrevive extrayendo la arena que invade su hogar, situado en una inaccesible sima. Esta claustrofóbica y erótica pesadilla de connotaciones existenciales y políticas se sostiene durante los 147 minutos de este montaje del director por su fascinante aprovechamiento del escenario –la arena es un personaje más, incluso el más fascinante– y por su perfecto equilibrio entre cine metafórico y película de evasión.
Criterio de valoración: ★ (Espero no volver a verla) ★★ (Podría volver a verla) ★★★ (Quizá la vuelva a ver) ★★★★ (Seguro que volveré a verla) ★★★★★ (La veré varias veces).